14.6.19
Favor de llamar más tarde (fragmento)
"...No me desilusiones, dijo muy seria, y yo le sonreí creyendo firmemente que aquella no sería sino una despedida como las que tienen los hombres comunes, que aman a una mujer de manera sencilla y sin el afán tortuoso de un hasta nunca. Respondí con un te quiero.
Antes de salir por última vez de aquel departamento de la Santa Ana, la última pregunta que me haría sobre ella me asaltó ¿No me desilusiones, o no me des ilusiones? ¿Qué fue lo que me dijo Ilse? La conocía bien y sabía que cualquiera de las dos opciones pudieron salir de su boca. Puta, qué pendejo, me dije, y yo sonriéndole. Me di cuenta, en esos tres segundos, en lo que giraba el manillar de la puerta, la abría y cerraba con un click tímido, de cuánto importa el espacio -donde sea- y entendí, con un dolorcito en el pecho, que lo nuestro no sería más. Ella no volvió a escribirme, ni yo volví para cumplir la promesa de amarla hasta la vejez..."
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